La instauración del Día del Preso Político Militar genera polémica. Agrupaciones de derechos humanos calificaron como una ofensa la iniciativa de los amigos y familiares de militares encarcelados por delitos cometidos durante la Dictadura.
El 3 de marzo del año 1991 fue ajusticiado, junto a su mujer, el mayor del Ejército, Carlos Pérez, por un comando del Frente Patriótico Manuel Rodríguez.
Como un homenaje a su memoria, la agrupación de Amigos y Familiares de Uniformados y Civiles encarcelados y Procesados, declaró el 3 de marzo como el Día del Preso Político Militar.
A juicio de Lorena Pizarro, presidenta de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos, la declaración es una ofensa a la memoria de los miles de desaparecidos durante la Dictadura.
Además, aseguró que no se pueden autocalificar de presos políticos los militares que persiguieron, torturaron y encarcelaron, durante más de 17 años.
Sin embargo, el diputado Alberto Cardemil (RN), defendió la iniciativa y dijo que a diario se violan los derechos humanos de los militares condenados.
Afirmó que los delitos cometidos por estas personas se dieron en un contexto de ‘agresión terrorista violenta’, por lo que se podrían considerar como presos políticos.
El General en Retiro del Ejército, Guillermo Garin, recordó que el presidente Sebastian Piñera se comprometió, durante su campaña, a revisar la situación de los militares condenados.
La Agrupación de amigos y familiares de militares condenados realizará mañana una liturgia en la Iglesia de Los Sacramentinos, a las 12 horas, donde pedirán la intervención del presidente Sebastián Piñera.
