El número de víctimas fatales por las lluvias torrenciales y deslizamientos de lodo en la región de sierra de Rio de Janeiro hace dos semanas ascendió este jueves a 830, mientras 518 personas aún continúan desaparecidas, según informes oficiales.

El último conteo realizado por los peritos de la Defensa Civil y distribuidos por el Ministerio de Integración, señaló que 9.988 personas perdieron sus viviendas en el desastre, mientras que otras 21.083 tuvieron que buscar refugio en otro lugar.

Al contrario de lo que ocurrió en la primera semana luego del desastre, el último reporte no discrimina el número de víctimas por las ciudades más afectadas (Nova Friburgo, Teresópolis, Petrópolis y Sumidouro).

En tanto, la oficina del Ministerio Público del estado de Rio de Janeiro recibió denuncias que indican la existencia de 518 personas con paradero desconocido desde las inundaciones y deslaves de hace dos semanas. De ese total, 239 fueron registrados como desaparecidos en el municipio de Teresópolis, uno de los más afectados.

En la madrugada del 11 de enero las lluvias torrenciales que cayeron durante una semana en la región de sierras, a unos 100 km de Rio de Janeiro, provocaron el desborde de varios ríos e incontables deslizamientos de lodo y piedras, que destruyeron prácticamente todo a su paso.

De acuerdo con las autoridades, se trata de una de las peores catástrofes naturales registradas en Brasil.