El libro de una estadounidense de origen sino-filipino que cree necesario “insultar” a los niños para lograr mejores resultados educativos, contrariamente a lo que considera ocurre en países occidentales, ha desatado una amplia polémica en internet.

En partes de su libro “Battle Hymn of the Tiger Mother” (“Himno de Batalla de una Madre Tigre”), publicadas por el Wall Street Journal, la profesora de la Universidad de Yale Amy Chua afirma que, para los padres “chinos”, la “solución para evitar resultados insuficientes es insultar, castigar y avergonzar al niño”.

No obstante, internautas de China negaron que los “métodos chinos para criar a los hijos” fueran así, mientras que un experto en educación recordó que la presión para obtener mejores resultados se ha acrecentado en China junto con la mayor competencia provocada por la liberalización económica.

Chua, quien nació en Estados Unidos en una familia china emigrada de Filipinas y se crió en ese país norteamericano, afirma que ella y su marido optaron por educar a sus hijos con métodos “chinos”.

Para ella, quien cuenta haber tratado a su hija de “basura” durante una cena con invitados, dichos métodos conllevan la prohibición de mirar televisión o de acostarse tarde.

“Todo padre decente quiere dar lo mejor a sus hijos. Los chinos tenemos una idea totalmente diferente de cómo lograrlo”, escribe Chua, quien afirma haber sido amenazada de muerte tras la publicación de estos fragmentos de su libro que excluyen, puntualizó, las partes en las que cuenta cómo aprendió a suavizar el modo de criar a los hijos.

Las afirmaciones de Chua, calificada de “monstruo” por algunos internautas, dio lugar a todo tipo de críticas y a la creación de una “comunidad” llamada “Amy Chua Article Fail” (“el fracaso del artículo de Amy Chua”).

Los comentarios en China no fueron tan numerosos, pero el punto de vista de Chua también fue cuestionado.

“Es inexacto llamar a eso ‘métodos chinos para criar a los hijos’”, afirmó tangshihuang, un usuario del microblog del portal Sina.com.

“Hay que garantizarle un buen futuro a nuestros hijos, pero el concepto de equilibrio siempre fue importante a lo largo de la historia china”, agregó.

Para Lao Kaisheng, profesor de ciencias de la educación en la Universidad Normal de Pekín, el libro de Chua podría interesarle a padres afectados por los rápidos cambios económicos y sociales que vive China.

La llamada “política de un solo hijo” ha dado lugar a una generación de niños que suelen ser considerados “malcriados”, en momentos en que la creciente competencia provocada por la liberalización económica aumenta la presión que sufren los padres de familia, dijo a la AFP.

“Padres y abuelos depositan todas sus esperanzas en un solo” descendiente. “Antes, los padres eran más tolerantes con las malas notas”, añadió.