Dos adolescentes resultaron heridos este martes en una escuela secundaria de Los Angeles donde aparentemente un estudiante, que fue detenido por la policía, se le disparó por accidente un arma que llevaba en su mochila, dijeron las autoridades.

Al principio la policía había informado a los medios locales que se trataba de un tiroteo y bloquearon el centro educativo público de Gardena, al sur del centro de Los Angeles, para dar con el supuesto atacante, otro adolescente, que fue detenido en una sala de clases.

“Nuestra información es que un estudiante se llevó una pistola a la escuela en su mochila, y se le cayó esa mochila y por lo tanto el arma se disparó”, explicó Robert Alaniz, portavoz del Distrito Escolar Unificado de Los Angeles (LAUSD, siglas en inglés para la agencia que regula las escuelas públicas en la ciudad).

“No estamos muy seguros de cómo fue que los estudiantes resultaron heridos, pero sí sabemos que tenemos dos estudiantes heridos que fueron trasladados al hospital”, agregó Alaniz.

La policía precisó que una de las balas dio en el cuello de un niño de 15 años y la otra fue a parar a la cabeza de una niña de la misma edad. Ambos adolescentes se encuentran hospitalizados en el Centro Médico UCLA-Harbor y están en compañía de sus padres.

La adolescente de 15 años está siendo operada, indicó la policía.

El tiroteo ocurrió cerca de las 10H30 (18H30 GMT) en el suburbio de Gardena, al sur del centro de Los Angeles. Las autoridades creen que los heridos son estudiantes del liceo público de la localidad.

El campus fue rodeado por patrullas de la policía y después de una hora y media del incidente medios locales mostraron a los oficiales llevándose a un estudiante adolescente esposado.

En esta escuela secundaria había este martes unos 2.600 estudiantes.

Este nuevo episodio con armas de fuego en Estados Unidos se produce a menos de dos semanas de un dramático tiroteo en un mítin político en Arizona (suroeste, frontera con California) que dejó seis muertos y 14 heridos, entre ellos a la congresista demócrata Gabrielle Giffords, quien se recupera de un balazo en la cabeza.