El español Rafael Nadal, N.1 mundial, se clasificó para la segunda vuelta del torneo abierto de Australia en sólo 47 minutos, al infligir 6-0, 5-0 al brasileño Marcos Daniel, quien, con la rodilla lesionada, finalmente abandonó.

Nadal conserva así todas sus fuerzas para su próxima partida, en la que se medirá con su compatriota Daniel Gimeno Traver o con el estadounidense Ryan Sweeting, según sus calificaciones.

Si bien los espectadores de la Rod Laver Arena esperaban una derrota fácil del jugador brasileño, 93 del mundo, su final lo precipitó la lesión.

Daniel, 32 años, cuyo principal logro en el Gran Slam es una segunda vuelta en Roland Garros, en 2008, cedió rápidamente el primer set en 19 minutos.

El brasileño hizo una resistencia simbólica al inicio de la segunda ronda, al hacerse de cuatro puntos de quiebre. No pudo convertirlos, sin embargo, y poco después pidió ser atendido.

Cojeando, casi inmóvil en la línea de fondo de la cancha, finalmente debió decidirse por el abandono, apenas una hora después de haber entrado, calentamiento incluido, y sin haber logrado un solo punto.

“Lo siento mucho por él. Espero que no sea nada importante. Pienso que cuando comenzó el partido ya estaba lesionado. No quiso declarar forfait, eso es algo que dice mucho de él, ya que todo el mundo no es capaz de eso. Es difícil decir si jugué bien o mal. El servicio habría podido ser mejor”, declaró Rafael Nadal tras el abandono de Daniel.

Por su parte el brasileño dijo que su lesión se produjo hace dos días durante un entrenamiento.

“Hice un mal movimiento. Sentí un dolor muy fuerte en la rodilla. Y hoy me dolía de verdad. Ahora voy a someterme a exámenes. Si uno no está al tope de su estado físico no hay nada que hacer frente a un jugador como Nadal. Jugar en la cancha central era lo peor para mí. Yo quería intentar algo. Sé que puedo jugar diez veces mejor que eso”, declaró Daniel.