4 días después del terremoto y posterior tsunami, se realizó una evacuación desde la Base Naval de Talcahuano hacia Valparaíso, destinada exclusivamente a familiares del personal naval, quienes abordaron el buque Aquiles de la Armada. Una vez conocido el hecho, se solicitó que la institución entregara detalles acerca del viaje realizado el 3 de marzo, pero ésta sólo dio a conocer una parte de la información, escudándose en el “código militar”. Esto motivó a que el Consejo para la Transparencia acogiera un recurso de amparo en contra de la Marina que podría obligar a romper el ‘silencio’ de los uniformados.

Buque Aquiles | Armada.cl

Buque Aquiles | Armada.cl

Según relata un extenso reportaje publicado este jueves por The Clinic, a fines de julio del año pasado un ciudadano -que no reveló su identidad y fue respaldado por la fundación Pro Acceso- envió una solicitud a la Armada para que diera a conocer los criterios en torno a la decisión de evacuar únicamente a familiares de marinos tras el 27F.

Sin embargo, la institución sólo se limitó a responder en forma muy general el 25 de agosto de 2010, a través de una carta firmada por el capitán de navío Luis Longhi, en la que se explica que tras el terremoto y tsunami que afectó a la zona centro sur, 106 viviendas de la Base Naval de Talcahuano quedaron totalmente destruidas, afectando a 426 personas. Por lo tanto “con el fin de que el personal naval pudiera dedicarse de forma exclusiva a cumplir con las tareas de mantención del orden público, contención de la emergencia de la ciudad de Talcahuano y la Base Naval, se determinó que el personal afectado por la catástrofe, que tuviera familiares en la Quinta Región o algún lugar donde su grupo familiar pudiera permanecer los evacuara hacia Valparaíso, en el buque Aquiles”.

A ello, el texto añade que 260 familiares, 106 tripulantes y 15 miembros de la Armada abordaron la nave, y que no se tiene registro de que personas ajenas a la institución subieran al barco. Ante esto último, cabe destacar que el testimonio de un hombre recogido por diario La Tercera en los días posteriores al megasismo, asegura que la Marina, “se apiadó de él” y le permitió viajar en el barco que era sólo para familias navales.

Si bien la Armada entregó una explicación a la polémica medida, no detalló cómo se estableció el criterio de evacuación, ni el nombre de la persona que lo decidió. De hecho, en la aclaración la institución dice que no puede entregar esos datos, acogiéndose a lo establecido en “el artículo 436 del Código de Justicia Militar”. Éste último refiere a documentos secretos “cuyo contenido se relaciona con la seguridad del Estado, la defensa nacional, el orden público o la seguridad de las personas”.

Tras esto, el presidente de la Fundación Pro Acceso, el abogado Federico Allendes, expresó que ahora que fue acogido el recurso de amparo, esperan que la Armada se pronuncie nuevamente, ya que incluso se puede llevar el caso a la Justicia.

Eso sí, asegura que podría pasar hasta 1 año para conocer la información solicitada y recalca que “no nos estamos pronunciando si hicieron bien o no en evacuar a familia del personal para que ellos hicieran su trabajo. Porque si el Aquiles hubiera evacuado a la gente de Talcahuano, quizás qué desorden se hubiera producido. Sabemos que el sistema constitucional no está prohibido discriminar, lo prohibido son las discriminaciones arbitrarias. Y, por eso necesitamos esta información para ver si estos criterios de no discriminación se cumplen y nos contesten en forma completa, no la información que ellos decidan” puntualiza.