La Sala del Senado aprobó esta tarde, con la asistencia y exposición del ministro de Hacienda, Felipe Larraín, el proyecto de ley enviado por el Gobierno del Presidente Sebastián Piñera que crea un nuevo Sistema de Protección de Precios de los Combustibles.

Por apoyar las modificaciones de las comisiones unidas de Hacienda y Minería de la Cámara Alta, hubo 13 votos a favor, dos en contra y siete abstenciones, éstas últimas en su mayoría de senadores de la Concertación.

De esta forma, la iniciativa —que viene a reemplazar el fondo de estabilización que operó hasta el 30 de junio de 2010— pasó a tercer trámite constitucional en la Cámara de Diputados, ya que fue objeto de indicaciones en el Senado.

El ministro Larraín informó que las dos principales indicaciones buscan incorporar a los transportistas para que queden cubiertos por este mecanismo, y aumentar en forma transitoria (dos años) el tope de ventas anuales de las empresas, desde 25.000 UF a 100.000 UF, para que puedan acogerse a este esquema de suavizamiento de precios.

El proyecto de ley ya había sido aprobado por amplia mayoría en general (idea de legislar) y particular por 97 votos a favor, seis en contra y cuatro abstenciones por la Cámara de Diputados el 17 de agosto de 2010.

La normativa establece, en una primera etapa, un nuevo Sistema de Protección de Precios de Combustibles (SIPCO), que permitirá disminuir los efectos de la volatilidad de los precios internacionales de los combustibles en nuestro país a través de la introducción de un componente variable (de +- 12,5%) al actual Impuesto Específico a los Combustibles (IEC).

Esto permitirá que este Impuesto Específico baje cuando los combustibles se disparen a nivel internacional y, por lo tanto, que los consumidores en Chile se beneficien de menores precios.

También se contempla que el kerosene doméstico (parafina) cuente con un sistema de protección ante las bruscas variaciones de precios, lo que se hará mediante un suplemento de recursos al actual Fondo de Estabilización de Precios del Petróleo (FEPP). Esto beneficiará directamente a las familias de menores ingresos.

En una segunda etapa, se creará un Seguro de Protección para proteger a los contribuyentes de las variaciones de precios de los combustibles (SEPCO), que será contratado por el Ministerio de Hacienda en el exterior.

Este Seguro de Protección reemplazará el componente variable que se aplicará en una primera etapa al actual Impuesto Específico a los Combustibles, y también permitirá amortiguar las bruscas fluctuaciones de los precios de los combustibles a nivel doméstico.

El ministro de Hacienda, Felipe Larraín, destacó que la iniciativa constituye un beneficio directo para las personas y para las Pequeñas y Medianas Empresas (Pymes).

Asimismo, subrayó que este proyecto de ley protege a los consumidores y, a la vez, las cuentas fiscales, ya que el anterior sistema de estabilización de los combustibles representó un costo para el país de US$ 2.300 millones en la última década, a razón de US$ 230 millones anuales.