Una manifestación frente a la Intendencia del Bío-Bío realizaron vecinos de Villa Futuro, de Chiguayante y Centinella, de Talcahuano, quienes piden a las autoridades un subsidio de arriendo para ser erradicados mientras se reconstruyen sus viviendas. Por su parte, las autoridades de la cartera dieron a conocer que las opciones que entregó el Gobierno no consideran ese beneficio.
Se trata de dos sectores poblacionales conocidos en la zona, Villa Futuro y Centinela, ambos que sufrieron daños post terremoto, cuyos edificios serán reconstruidos por Serviu, en el mismo lugar, situación que los obliga a abandonar sus viviendas hasta su reconstrucción.
Pese a los esfuerzos de Serviu, existen vecinos que aún no encuentran claridades de qué harán mientras se demuele y recontruye. Por lo mismo, piden un subsidio para arrendar una casa provisoria para enfrentar el proceso que podría tardar más de un año.
Más allá fue el senador Alejandro Navarro, quien anunció que interpondrá un recurso de amparo, para que las familias no sean erradicadas, hasta obtener el subsidio de arriendo que le permitirá sobrevivir mientras son emplazados sus nuevos edificios. Además denunció amenazas hacia las personas.
Pese a la afirmación, Rosalba Bello, presidenta de la Junta de Vecinos de Centinela en Talcahuano, reveló que nunca han recibido amenzas para ser desalojados, pero que sí se ha procedido al diálogo con Vivienda.
Y exactamente el Seremi de dicha cartera Enrique Matuschka explicó que no habrá subsidio de arriendo, pero sí opciones claras que están medianamente consensuadas con los vecinos.
Lo cierto es que la demolición estaba decretada para el 15 de noviembre, situación que por estas dudas y faltas de acuerdo fue suspendida hasta el primer trimestre del presente año, con el propósito de aunar criterios y despejar inquietudes de los vecinos.
