El diputado y médico Víctor Torres (DC), integrante de la Comisión de Salud, advirtió que “los confusos y contradictorios hechos detectados en el Ministerio de Salud, con evidentes retrasos en el proceso de licitación de las vacunas para la influenza estacional 2011, puede tener consecuencias gravísimas para la salud de las familias chilenas”.

La semana pasada y, tras desarrollarse la sesión de la Comisión de Salud a puertas cerradas, la Subsecretaria de Salud Pública, Liliana Jadue, aclaró a los diputados que el retraso en la compra de las vacunas de influenza estacional se debía a un problema administrativo en el proceso de licitación, ya que en los dos llamados que han realizado los proveedores no han entregado muestras que cumplan con el requisito de vigencia de 12 meses del producto.

Declaraciones que según el diputado Torres se contraponen con los dichos del ministro de Salud Jaime Mañalich. “El Ministro aseguró días atrás que el retraso en la licitación se debía a que se estaba esperando establecer cuál es la cepa que circula en el Hemisferio Norte, nunca habló de un problema administrativo, esto demuestra que hay graves problemas de comunicación dentro del Ministerio de Salud”, señaló.

El parlamentario explicó además que “el problema es que la licitación fue declarada desierta por la Central Nacional de Abastecimiento (CENABAST), debido a que las vacunas anti-influenza vencían antes de que termine el período de la campaña de prevención de la influenza”.

Por lo mismo, el diputado señaló “ya estamos cuatro meses atrasados, la licitación se ha hecho siempre en los meses de septiembre y octubre, tiempo suficiente para que sea fabricada, traída y luego analizada por el Instituto de Salud Pública (IST)”.

Finalmente, el diputado Torres llamó al Gobierno a tomar las medidas necesarias para agilizar la licitación “la situación puede volverse muy grave si no se apuran los plazos, el Instituto de Salud necesita por lo menos un mes para evaluar la vacuna y el Gobierno tiene hasta el 30 de marzo para que comience la campaña de prevención y no se arriesgue la salud de miles de familias que pueden ser contagiadas, en especial niños, mujeres embarazadas, tercera edad y el personal de salud”.