En la actualidad, cada vez más niños están inmersos en el mundo de las tecnologías, lo que es una mina de oro para los “pedófilos” que lamentablemente usan con frecuencia estos medios para “conseguir víctimas”.

En España, por ejemplo, hasta el 15% de los menores internautas entre 10 y 17 años recibe alguna propuesta sexual y el 34% de ellos se encuentra con material sexual que no ha buscado; según informó ElMundo.es

Es por esta razón que los padres juegan un rol fundamental, pues, son los responsables de enseñar a sus hijos a poner freno a los acosadores, es decir, saber decir que no. Para ello, es fundamental mantener una buena comunicación con ellos, de modo de generar confianza y que en caso de que esto suceda, puedan contarlo sin temor. Recuerda que es frecuente que los pederastas traten de contactarse con las víctimas utilizando identidades falsas o mintiendo en la edad, por lo que también debes estar atento/a a eso.

Si eres padre/madre y quieres prevenir que algo así pase con tus hijos, debes poner atención a los siguientes consejos:

1.- Evita la instalación de webcam o restringe su uso mediante algún programa, claves o controles parentales.

2.- Coloca el computador en lugares comunes de la casa. Ésto te permitirá controlar frecuentemente las actividades de tus hijos y que ellos también estén en conocimiento de que tú estás atento/a.

3.- Edúcalos sobre los peligros de Internet y que nunca deben entregar datos personales ni claves a través de la red, menos a personas que recién han conocido. Si algo así sucede, los “acosadores” tendrán algo con qué chantajear , pues tienen acceso a información que quizás tus hijos oculten y que no quieren que se sepa y así acceder a sus peticiones.

4.- Es importante conocer a sus contactos y revisar sus redes sociales. Es por ello que la comunicación es clave en este caso, ya que si notas que conversa con alguien que no conoces, deberías tender a desconfiar; no obstante, primero pregunta con quién habla.

5.- Horario. Intenta que no chateen con sus contactos por la noche y menos a escondidas, pues ésto ya es indicio de que algo no anda bien.