Luego de que el portal electrónico El Mostrador afirmara que el ministro de Defensa, Jaime Ravinet, advirtió al Consejo para la Transparencia que revelar información sobre las adquisiciones de la cartera llevaría a las Fuerzas Armadas a no prestar nuevamente ayuda ante una catástrofe, la respuesta del secretario de Estado no se hizo esperar.

Imagen: Gobierno de Chile (Oficial)

Imagen: Gobierno de Chile (Oficial)

En una escueta declaración realizada durante su visita a la Antártica, Ravinet señala:

“Una vez más El Mostrador falta a la ética periodística, al usar mañosamente un párrafo de un argumento jurídico en un escrito de reposición al Consejo de Transparencia (CPLT), relativo a lo que es el secreto en materias militares. Quiero reiterar y aclarar que las FF.AA. son esencialmente obedientes y disciplinadas al Poder Ejecutivo. Por tanto, siempre que la autoridad lo solicite, estarán dispuestas a ayudar a la comunidad frente a catástrofes naturales, como lo hicieron el pasado 27 de febrero”.

El hecho tuvo su inicio en la compra de un puente mecano usando la ley reservada del cobre, gestión por la que se pagó un sobreprecio de 2 millones de dólares. Esto motivó que la empresa que perdió la licitación, la británica Mabey Bridge Limited, denunciara irregularidades al haber optado por la estadounidense Acrow Corporation, la que percibió 16 millones de dólares por la estructura.

Así, y ante el requerimiento del CPLT sobre el caso, Ravinet entregó un escrito desde donde El Mostrador rescató la siguiente frase:

“A futuro las Fuerzas Armadas serán renuentes a prestar colaboración a las autoridades civiles ante catástrofes de la naturaleza, al verse obligadas a exhibir su material de guerra o equipamiento militar para acudir a prestar auxilio a la población civil, sean forma transitoria o permanente, como su Consejo lo está haciendo con los puentes mecanos”.

Según el portal electrónico, la afirmación del ex militante DC habrían causado molestia entre los altos mandos militares, ya que además de dar a entender tácitamente un inexistente acuerdo secreto para que Ravinet sacara la voz por ellos, echa por la borda la campaña para mejorar la imagen de la Armada tras los errores cometidos por el SHOA.