Un centenar de personas desfiló el miércoles en Ghazni, en el sur de Afganistán, gritando “¡Muerte a Estados Unidos!” y acusando a los soldados estadounidenses de la OTAN de haber matado a tres civiles en una operación en la región.

Unos 120 hombres llevaron por las calles de la ciudad tres cuerpos descritos como de “civiles inocentes” muertos en el distrito vecino de Nawar. Después se dirigieron a la mezquita, constató la AFP.

“Tenemos la certeza de que uno de los muertos es un civil. Según lo que hemos investigado hasta ahora, pensamos que los otros dos también son civiles”, declaró a la AFP Sayed Amir Shah, el jefe de los servicios de información de la provincia de Ghazni, añadiendo que la investigación seguía abierta.

Para tranquilizar a la multitud, Shah prometió hablar con el ejército estadounidense en nombre de los manifestantes.

La Fuerza Internacional de la OTAN en Afganistán (ISAF) anunció en un comunicado haber matado a “varios insurgentes” el martes en el distrito vecino de Rashidan. Sigue sin embargo investigando la localización exacta de los hechos, precisó a la AFP uno de sus portavoces, agregando que “parece que se trata del mismo incidente”.

Los hombres muertos en este incidente eran insurgentes, los soldados de la coalición replicaron a disparos, afirmó.

Por otra parte, la ISAF anunció la muerte el miércoles de dos soldados extranjeros por explosión de dos bombas artesanales: uno en el sur y otro en el este de Afganistán.

Como tiene por norma, la ISAF no revela la identidad o la nacionalidad de los soldados muertos en operaciones en Afganistán, dejando esa decisión a las autoridades del país de donde provienen.

Al menos cinco soldados de la OTAN murieron desde el 1 de enero según un recuento de la AFP a partir del sitio icasualties.org.

En 2010, el número de bajas militares extranjeras se elevó a 711, en lo que fue el peor año para los soldados extranjeros desde el comienzo del conflicto en 2001.

Unos 140.000 soldados de la ISAF, compuesto en dos terceras partes por militares estadounidenses, se encuentran en Afganistán combatiendo la insurrección de los islamistas talibanes, expulsados del poder en 2001.