Nuevos cuestionamientos de la Democracia Cristiana reactivaron la controversia en la Concertación sobre el acuerdo para que el PPD Guido Girardi asuma la presidencia del Senado en marzo. Las acusaciones de montaje del gobierno contra Girardi por el caso de Claudia Pizarro, reavivaron las críticas falangistas.
El fin de semana, el propio presidente de la Democracia Cristiana, Ignacio Walker, aseguró que el congresista debe una explicación al país y a la Concertación.
Tras la reunión semanal de los presidentes de las colectividades opositoras, el senador Walker estimó que el episodio de Claudia Pizarro no contribuye a un debate serio sobre temas como el aborto terapéutico. Requerido si para la DC la asunción de Girardi a la presidencia del Senado está cerrada, el dirigente precisó que no hay temas cerrados en la Concertación.
Por su parte, el senador falangista Hosain Sabag declaró que el caso de Claudia Pizarro es un nuevo elemento a considerar para el tema de la presidencia de la Cámara Alta.
Las nuevas quejas en la DC provocaron molestia en el PPD. El jefe de su bancada de senadores, Jaime Quintana, dijo que el cuestionamiento a Girardi es parte del complejo plan diseñado por sectores conservadores para impedir el debate sobre la despenalización del aborto terapéutico.
Añadió que las críticas de la falange son inaceptables y acusó a los parlamentarios DC que las han planteado, partiendo por Ignacio Walker, de hacerse eco de esta estrategia de fracciones de la derecha.
Por su parte, la presidenta del PPD, Carolina Tohá, insistió que el bloque debe respetar el acuerdo para que su partido ejerza este año la presidencia de la Cámara Alta y dijo que la designación de Girardi es tema zanjado.
La reactivación de esta controversia, a partir de las nuevas quejas demócrata cristianas, iba a ser tema anoche de una reunión de los presidentes de los partidos de la Concertación y sus senadores, cita que fue suspendida y que se realizará hoy en Valparaíso.
