Sin daños materiales ni físicos que lamentar pero con mucho temor, los habitantes de la provincias de Bío-Bío y Malleco vivieron el fuerte sismo que remeció a la zona centro sur del país.

Desde marzo que en la zona no se sentía un movimiento telúrico de gran magnitud, temblor que nos pilló de imprevisto y en plenas celebraciones aún de Año Nuevo, según el reporte de auditores.

La inquietud de los habitantes de la provincia se hizo sentir a través de las colapsadas lineas telefónicas de La Radio, donde cada uno a su manera relató lo vivido a las 17 horas con 20 minutos.

Las lineas de telefonía celular también colapsaron, por lo que a ratos era imposible comunicarse, no obstante desde las diversas comunas de la provincia, el reporte de los auditores no daba a conocer perdidas físicas ni materiales, sólo cortes de energía en algunos sectores rurales.

En Angol en tanto, los auditores reportaban lo siguiente.

En las calles de Los Ángeles en tanto, quienes se encontraban en las tiendas y centros comerciales comenzaron a salir en calma y sólo se saturaron las bencineras por quienes concurrieron a llenar sus estanques con combustible.

Cabe consignar que según el informe de la Universidad de Chile, la magnitud del sismo alcanzó los 6.9 grados en la escala de Richter, mientras que el Servicio de Geología de Estados Unidos lo cifró en 7.1.