El vocero de los seis trabajadores de la empresa de transporte de pasajeros Transaraucarias que se encuentran en huelga de hambre, Denis Vargas, afirmó este jueves que el estado de salud de los manifestantes es crítico, luego de 26 días de ayuno.

“Están sufriendo fuertes dolores abdominales y óseos, baja de peso sumado a las bajas de presión”, afirmó Vargas, quien lamenta que las autoridades digan que es un “conflicto entre privados, y por tal razón, no se intervenga más directamente siendo que el caso de los mineros también fue entre privados y el trato fue diferente, entrar en detalles esta demás”, sostuvo.

Los trabajadores en huelga de hambre son: Abel Ulloa Leiva, Benito Pérez Pérez, Cristián Cid, José Baeza, Roberto Estay y Javier Soto Bustos.

El grupo exige continuidad laboral, regularización de cotizaciones previsionales impagas y trabajar en conjunto con el Ministerio del Trabajo en un proyecto de ley que de garantías, y que aseguren una solución real y efectiva a las demandas de los trabajadores del Transantiago y que sea realmente aplicable.

Según el vocero de los huelguistas “aquí en nuestro conflicto no se da solución alguna ya que las prestaciones adeudadas por la empresa es lo que provocó estas movilizaciones que no son reconocidas en este tema”.

A su juicio “no es negocio para el gobierno ya que le baja los puntos en las encuestas, en el caso minero, fue diferente ya que pudieron hacer un lucro público mediático, en nuestro caso, al igual que el de la mina San José, fue un tema en que los privados no cumplieron y el Estado no fiscalizó adecuadamente las deficiencias por lo que estamos en un caso similar”, manifestó Vargas tras reunirse con Rodolfo Cid miembro del ejecutivo de la Central Autónoma de Trabajadores de Chile (CAT).

La génesis de este conflicto surge el día 1 de junio, debido a que la empresa no canceló los sueldos con un promedio de cuatro meses de cotizaciones impagas, lo que generó el movimiento de cese que abarcó el 100% de la empresa, al octavo día de este movimiento “el Ministerio del Transportes inició un proceso de caducidad dejando a 650 trabajadores sin su fuente laboral, en ese momento, se manifestó que se buscaría una solución alternativa a este conflicto que fuera acorde a lo que trabajadores requerían”.

“El día 1 de octubre, esa solución se tradujo en 260 cupos en instalación para conductores dejando fuera a todo el personal más vulnerable de esta empresa (400 trabajadores cesantes), lo que consideramos injusto y discriminatorio, dando paso a esta huelga de hambre, la que hasta hoy no tiene importancia para las autoridades”, aseguró el vocero.