Las autoridades haitianas y organismos internacionales intensificaban esfuerzos para evitar que el cólera se extienda en Haití, donde el martes se reportaron 25 muertes, que elevaron a 284 el balance total en este país devastado por un sismo y la pobreza.

Las cifras divulgadas el martes por las autoridades sanitarias dan cuenta de 25 decesos en 24 horas, que dejan el saldo parcial de decesos en 284. El número personas en tratamiento en clínicas y hospitales de todo el país se incrementó en 270, a 3.612, indicó Roc Magloire, del Ministerio de Salud.

La ONU y la Organización Mundial de la Salud (OMS) pidieron no bajar la guardia, ante el riesgo de que el mal se instale en los campamentos de refugiados favorecido por las malas condiciones de higiene en que viven las más de 1,3 millones de personas que perdieron su hogar tras el sismo de enero.

“En la OMS creemos que se hallarán más casos. Lo más importante es la prevención”, dijo este martes Fadela Chaib, portavoz de esa institución sanitaria internacional, desde su sede en Ginebra.

La vecina República Dominicana reabrió el martes los mercados binacionales que se instalan dos veces por semana en los cinco puntos fronterizos, y que había clausurado preventivamente el lunes.

Para ingresar desde Haití, las personas deben lavarse y desinfectarse las manos y luego llenar una planilla médica, indicó el gobierno dominicano, que además estableció varios puntos con agua potable, jabón y cloro para “garantizar la higiene”.

“No hay necesidad de cerrar las fronteras o restringir los viajes o negocios porque un país vecino tenga cólera. Esto lo decimos para todos los brotes de cólera en el mundo”, sostuvo Chaib en su informe del martes.

Varios países y entidades internacionales anunciaron envíos de ayuda, y los gobiernos de la región reforzaron la vigilancia epidemiológica, incluidos Venezuela y Ecuador, que además han despachado sendos cargamentos humanitarios de emergencia con agua, antibióticos, suero oral, medicinas, cloro y productos de aseo.

Asimismo, Colombia activó medidas de precaución que incluyen información a la vista para los viajeros, revisión de las condiciones sanitarias en los viajes marítimos y aéreos y seguimiento de los turistas que llegan al país.

“En Colombia se han incrementado los viajes a Haití a través de la ayuda después del sismo y ha habido mucho movimiento de personas” procedentes de ese país, explicó Víctor Hugo Alvarez, epidemiólogo del ministerio de Protección Social encargado de coordinar la vigilancia en salud pública, a la AFP.

La embajada de Estados Unidos en Puerto Príncipe informó el martes sobre la inminente llegada de unos 20 especialistas epidemiólogos de sus Centros de Control de Enfermedades (CDC). También Brasil, que dirige las operaciones militares de la Misión de la ONU para la Estabilización de Haití (Minustah), prometió medicamentos y médicos epidemiólogos.

Más temprano, el gobierno de Francia informó que preparaba dos misiones médicas, una de ellas desde las Antillas francesas para reforzar la ayuda sanitaria, en particular en guarderías y orfanatos.

Además aportará 100.000 euros (USD 138.000) en asociación con la Cruz Roja francesa, que el martes indicó que instalaría dos unidades de tratamiento de agua en Haití.

Por otra parte, la OMS dijo que Trinidad está ayudando a otras islas del Caribe a movilizarse para tratar a cualquier viajero infectado que llegara a sus costas.

En un informe sobre la situación del brote, la organización Médicos Sin Fronteras (MSF) recomendó el martes mantener “la vigilancia aún ante algunos signos positivos” en el desarrollo de la enfermedad.

MSF, que tiene 20 camas para enfermos de cólera en Puerto Príncipe, dijo haber tratado a 33 personas, y anunció que 100 toneladas de equipamiento y de material fueron despachados rumbo al país más pobre de América.

El cólera, causado por una bacteria, se contagia por agua y alimentos, y provoca violentas diarreas. Las medidas higiénicas estrictas y el suministro de agua potable son la mejor manera de detener su desarrollo.