En el inicio de un ataque al corazón lejos de un centro médico, el masaje cardíaco realizado por un testigo es más eficaz sin la respiración boca a boca, según un estudio publicado este martes por el Journal of the American Medical Association (JAMA).

Markus Hanser en SXC

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En Estados Unidos son aproximadamente 300.000 las personas víctimas de ataques cardiacos lejos de centros hospitalarios.

Las posibilidades de supervivencia pueden ser significativamente mejoradas por la reanimación cardiopulmonar (RCP) prodigada por un testigo, según los autores de la investigación.

Pero según ellos, el masaje cardiaco realizado sin la respiración boca a boca aumenta las posibilidades de supervivencia de la víctima.

El estudio se llevó a cabo bajo un programa iniciado en Arizona (suroeste) en 2005 con la finalidad de mejorar la supervivencia para las víctimas de un ataque al corazón.

“Este programa incluyó cambios en la atención de los transeúntes y personal de los servicios de emergencia médica a partir de observaciones y datos que muestran que es preferible limitar las interrupciones (necesarias para realizar el boca a boca) durante las compresiones en el pecho”, escriben los autores del estudio.

El estudio se realizó entre enero de 2005 y diciembre de 2009 a 4.415 personas de al menos 18 años que sufrieron un ataque cardiaco fuera del hospital.

De ellos, 2.900 (65,6%) no recibió ninguna intervención durante el paro cardíaco, 666 (15,1%) tuvieron RCP convencional -es decir, con ventilación artificial- y 849 (19,2%) sólo masaje cardiaco.

La tasa de supervivencia al alta hospitalaria fue de 5,2% para aquellos que no han recibido RCP, de 7,8% en aquellos que se sometieron a la RCP convencional (incluyendo respiración boca a boca) y de 13,3% para quienes se ha prodigado sólo masaje cardíaco externo.