Pakistán avanza rápidamente hacia la construcción de un nuevo reactor nuclear que otorgaría a ese país la posibilidad de producir armas atómicas más fáciles de lanzar, afirmaron este martes expertos estadounidenses.

El Instituto para la Ciencia y la Seguridad Internacional, un grupo privado estadounidense crítico de las armas nucleares, afirma haber detectado grandes progresos en la zona de Khushab, sitio crucial para la producción de plutonio, fuertemente custodiado por los paquistaníes, en la provincia de Punjab.

El instituto afirma haber observado en una imagen de satélite tomada en setiembre que un tercer reactor tiene ahora una fila completa de torres de refrigeración. La construcción de éstas torres se inició en 2006.

Esto revelaría una acelaración en el ritmo de construcción en relación con las torres de refrigeración del segundo reactor, cuya construcción había durado seis años, sostuvieron los expertos estadounidenses.

“Por lo que veo en la foto, no me sorprendería que el reactor comenzara a operar en 2011,” dijo Paul Brannan, un analista del instituto.

Los expertos afirman haber visto el vapor del segundo reactor en imágenes que datan del 31 de diciembre, lo que indica que están funcionando. Las últimas imágenes lo muestran sin vapor, pero el Instituto insiste en que los reactores no se utilizan de forma continua al principio, y que el clima podría afectar a la visibilidad.

Pakistán se declaró potencia nuclear en 1998, pocos días después que su rival y vecino, India. El arsenal nuclear paquistaní se basó originalmente en uranio altamente enriquecido.

Los analistas occidentales creen que Pakistán recibió ayuda de China para construir el sitio en Khushab para producir plutonio, que puede ser usado en misiles de crucero contra la India.

“Las bombas de plutonio permiten hacer armas más pequeñas, más ligeras y más potentes, pero también más fáciles de lanzar, y sospecho que es lo que quiere Pakistán”, dijo Brannan.

El arsenal nuclear de Pakistán es una cuestión extremadamente sensible para los Estados Unidos, que busca mejorar las relaciones con este país, aliado clave en su lucha contra los extremistas islámicos.