La revista católica “Espacio Laical” acusó este lunes a la disidencia radical cubana de “torpedear” la mediación de la Iglesia en la excarcelación de los presos políticos, al quejarse por escrito ante el Papa de una actuación “lamentable y bochornosa” de los Obispos.

Foto: thehavananote.com

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La carta, con nombres de 165 disidentes y entregada el viernes en la Nunciatura Apostólica en La Habana, “debemos verla en el contexto de una campaña para torpedear las gestiones emprendidas por la Iglesia cubana”, señala un editorial de la publicación.

“Según nos han informado fuentes cercanas a la disidencia interna, la ‘iniciativa’ (…) se gestó fuera de Cuba, y nos aseguran que fue concebida como combustible para lograr deslegitimar el actual proceso”, añadió.

En la misiva al Papa Benedicto XVI, los disidentes señalan que “no estamos de acuerdo con la postura que ha mantenido la jerarquía eclesiástica cubana en su intervención por los presos políticos, es lamentable y de hecho bochornosa”. Los disidentes recriminan a los Obispos su “apoyo político” al gobierno.

Un inédito diálogo iniciado el 19 de mayo pasado entre el presidente Raúl Castro y el cardenal Jaime Ortega, arrojó la excarcelación de 52 presos políticos -los primeros 26 viajaron a España- y el cese de hostigamientos a las Damas de Blanco y otros familiares de presos, que hacen marchas callejeras.

El diálogo y sus resultados fueron aplaudidos por sectores de la disidencia interna y bien recibidos por la Unión Europea, Estados Unidos y otros países. La carta al Papa provocó un inmediato rechazo del Arzobispado de La Habana y reacciones de distanciamiento de otros sectores de la oposición interna.

“Resulta llamativo que sea la oposición radical, que jamás ha trabajado en la construcción de un escenario para un posible diálogo político con el Gobierno cubano (más bien todo lo contrario), la que le recrimine semejante asunto a la Iglesia”, dicen los laicos. Añaden que “asumir esas actitudes que favorezcan el diálogo y el consenso entre nacionales no implica solo al Gobierno, sino también, y sobre todo, a quienes se le oponen”.

“Seguir perfilando y articulando el debate en la sociedad cubana en torno a la democracia, la reforma económica, la justicia social, la soberanía nacional y la conciliación entre cubanos es hoy, más que nunca, estratégico”, indicaron.