Casi dos años después de la elección de Barack Obama como presidente de Estados Unidos, un creciente número de estadounidenses cree que es musulmán, según una encuesta del Pew Research Center divulgada este jueves.
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Pese a que Obama asiste a la iglesia y ha reiterado públicamente su fe cristiana, casi uno de cada cinco de los encuestados dijo creer que el presidente practica el islamismo, mientras solo el 34% lo identificó correctamente como cristiano, nivel netamente inferior al de un año atrás.
Mientras tanto, el porcentaje de personas que se manifiesta insegura acerca de qué religión practica Obama aumentó a 43%, contra 34% el año pasado.
La encuesta encontró que un tercio de los republicanos conservadores considera que Obama es musulmán, cifra que prácticamente se duplicó respecto a la medición del año previo.
La fe del presidente fue asimismo identificada incorrectamente por un creciente número de demócratas e independientes, de acuerdo con el sondeo realizado entre el 21 de julio y el 3 de agosto entre 3.003 personas.
Cerca de 18% de los votantes independientes dijo pensar que Obama es musulmán, ocho puntos porcentuales más que la medición previa, mientras que menos de la mitad de los seguidores demócratas del presidente creen que es cristiano.
El sondeo fue realizado antes de que Obama entrara en la amarga discusión de la semana pasada sobre los planes para construir una mezquita a pocas cuadras de donde se erigían las torres gemelas de Nueva York, derribadas en los atentados del 11 de setiembre de 2001.
Obama dijo el viernes que la defensa de la libertad de culto debe ser aplicada de la misma forma a todos los credos, y que los musulmanes tienen el derecho a ejercer su religión libremente en Estados Unidos.
Un día después, el mandatario agregó que sus comentarios no tenían intención de juzgar la pertinencia de construir o no una mezquita cerca de la Zona Cero.
De los encuestados que dijeron creer que Obama era musulmán, 60% dijo haberse enterado de su fe a través de los medios.
Pero funcionarios de la Casa Blanca dijeron al diario The Washington Post que la percepción equivocada sobre la religión que practica el presidente es producto de “campañas de desinformación” impulsadas por la oposición.
“Mientras el presidente ha sido diligente y se ha comprometido personalmente con su fe cristiana, ciertamente hay gente que intenta divulgar falsedades sobre el presidente, sus valores y sus creencias”, dijo su asesor religioso Joshua DuBois.
