El ex presidente de la República italiana, Francesco Cossiga, falleció este martes a los 82 años en el hospital Gemelli de Roma, donde se encontraba internado desde hace una semana por problemas de corazón y respiratorios, anunciaron fuentes oficiales.

Cossiga

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Las condiciones de salud de Cossiga se empeoraron en la madrugada del martes tras varios días de mejoramiento y murió hacia el mediodía de un paro cardíaco.

Cossiga, uno de los protagonistas de la historia reciente de Italia, era uno de los líderes más representativos de la otrora poderosa Democracia Cristiana. Fue jefe de gobierno en 1979, presidente del Senado en 1983 y presidente de la República en 1985 por un mandato de siete años.

Entre los políticos más controvertidos de Italia, fue ministro del Interior cuando fue secuestrado por los extremistas de izquierda de las Brigadas Rojas el líder de la Democracia Cristiana, Aldo Moro, en 1978, uno de los momentos más difíciles de su carrera.

La gestión del secuestro que terminó con la muerte de Moro le valió duras acusaciones de algunos sectores de haber sacrificado al dirigente político.

Con su muerte se lleva consigo numerosos misterios de los llamados “años de plomo” de Italia, cuando el terrorismo imperaba y fueron perpetrados más de 15.000 atentados entre 1969 y 1986.

Faltando pocos meses al término de su presidencia, en 1992, renunció al cargo tras haber protagonizado una serie de controversias y polémicas durante los últimos dos años por sus denuncias contra la clase política, defendiendo un régimen presidencial y no parlamentario y reclamando reformas de las instituciones.