BP reinició la perforación de los pozos de auxilio que deben poner fin definitivamente al derrame en el Golfo de México, brevemente suspendida debido al clima desfavorable, anunció el jueves un portavoz de la petrolera británica a AFP.

El anuncio de la cercanía de una depresión tropical había causado la interrupción de los trabajos el miércoles y se preveía que la suspensión durara cuatro días, debido a temores por vientos fuertes y mar agitado. No obstante, la perturbación se disipó antes de lo previsto.

“Volvemos a poner las cosas en marcha. Retomamos los trabajos de los pozos auxiliares que están siendo perforados”, declaró Robert Wine, portavoz de BP, que el jueves anunció la culminación de las operaciones de cementación del pozo (“static kill”).

Pero para cerrar el capítulo técnico de la catástrofe, el grupo aún debe completar las perforaciones de dos pozos auxiliares que permitirán verificar el éxito del sellado y encementar el pozo también por debajo (“bottom kill”), para cerrarlo de manera definitiva.

El derrame de crudo comenzó el 20 de abril frente a las costas de Luisiana (sur de EEUU), tras la explosión que dejó 11 operarios de BP muertos en la plataforma ‘Deepwater Horizon’, que dos días después se hundió y dio origen a la peor catástrofe ambiental de la historia de Estados Unidos.