El presidente de Venezuela Hugo Chávez exhortó este domingo a las guerrillas colombianas a liberar a “todos sus secuestrados”, como parte de un “nuevo proceso de paz” que vive Colombia con la llegada al poder de Juan Manuel Santos.

“Esa guerrilla debería manifestarse por la paz, pero con manifestaciones contundentes. Por ejemplo que liberen a todos los secuestrados. ¿Por qué una guerrilla va a tener secuestrados?”, dijo Chávez en su programa de radio y televisión ‘Aló Presidente’.

“La guerrilla colombiana no tiene futuro por la vía de las armas” y, por el contrario, “se han convertido en una excusa del imperio (norteamericano) para intervenir en Colombia y amenazar desde allí a Venezuela”, añadió Chávez, a quien recientemente acusaron desde Bogotá de dar refugio a guerrilleros.

Estas acusaciones, que llegaron a la Organización de Estados Americanos (OEA), llevaron a Chávez a romper relaciones con Bogotá e incluso a mover tropas a la extensa frontera que comparten ambos países.

“Para nosotros la guerrilla colombiana es también un problema (…) Yo ni he aprobado, ni apruebo, ni aprobaré presencia alguna de fuerzas guerrilleras. Este territorio es soberano”, insistió.

Sin embargo, con la llegada al poder de Juan Manuel Santos en Colombia, el mandatario venezolano cree que comienza un “nuevo momento de búsqueda de la paz” en ese país, que incluso permitiría restablecer la “confianza” entre ambos gobiernos.

“Yo lo he dicho, así como al gobierno de Colombia uno le propone buscar el camino de la paz, a la guerrilla también (…) hay que hacerle un llamado”, indicó Chávez.

Las izquierdistas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) pidieron a Santos la semana pasada en un mensaje en video dar comienzo a negociaciones de paz.

“Seguimos empeñados en buscar salidas políticas”, expresó Alfonso Cano, máximo líder de las FARC en un video transmitido por internet.

Sin embargo, el nuevo mandatario colombiano, que afirmó estar “abierto al diálogo”, condicionó “cualquier conversación” con la guerrilla a “las premisas inalterables de la renuncia a las armas, el secuestro, la extorsión, el narcotráfico y la intimidación”.

El gobierno de Chávez ha sido señalado en varias oportunidades de tener nexos con las guerrillas colombianas, principalmente con las FARC, una denuncia que Caracas rechaza.

Pero pese a estos supuestos vínculos –que Caracas niega y que fueron los causantes de los numerosos choques entre Chávez y el ex presidente Alvaro Uribe– Chávez llamó a los guerrilleros “a que nos sentemos a hablar de paz, a considerar desde el punto de vista político”.

“La realidad de América Latina no es la misma de hace 40, 30 ó 10 años (…) Estoy seguro que toda la Unasur estará de acuerdo” con este debate, agregó.

Previo a las recientes denuncias de Bogotá en la OEA, que llevaron a una nueva ruptura de relaciones, los siempre frágiles vínculos tuvieron un momento muy crítico en 2008, cuando Colombia lanzó un ataque militar contra un campamento clandestino de las FARC en Ecuador y mató al líder guerrillero Raúl Reyes.

Chávez advirtió entonces a Uribe que si realizaba una agresión similar en territorio venezolano sería “causa de guerra”, por lo que ordenó cerrar la embajada de Venezuela en Bogotá, y movilizó tropas hacia la frontera.

Ahora, con la llegada al poder de Santos, Chávez ha manifestado su disposición a “voltear la página” y comenzar una nueva relación bilateral basada en restablecer la “confianza” a través del “respeto” mutuo.