Luego que el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) informara este viernes, que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) en julio registró un aumento de 0,6%, el economista del grupo de Nueva Economía de Flacso, Hernán Frigolett, afirmó que este resultado está dentro de lo esperado.

A juicio del experto, lo anterior es debido “al anuncio realizado por el INE con respecto a la reposición de la tasa de impuesto de timbre y estampillas que por sí solo explica casi 90% del alza del índice global”, aseguró a Agencia UPI.

Según Frigolett, otros fenómenos esperados eran los impactos al alza del pasaje de Transantiago y de los combustibles, y quedó pendiente el alza de las tarifas eléctricas que según sus pronósticos se debieran materializar en los meses venideros.

Los alimentos siguen al alza producto de los impactos de las heladas recientes, en ese sentido explicó que “es muy probable que en el mes de agosto se produzcan impactos aún mayores”. En tanto agregó que las liquidaciones de vestuario y calzado presionaron el IPC a la baja.

“El IPCX1 muestra una variación negativa al dejar de lado el efecto de la tasa del impuesto de timbres y el alza de los combustibles. En general, son malas noticias para los sectores de menores ingresos, ya que los productos de mayor incidencia en su canasta de consumo son los que más han elevado sus precios”, precisó el economista.