Como una renuncia dolorosa, pero necesaria para la labor similar a la de un juez que desarrolla un obispo, fue calificada por el Arzobispado, el caso omiso del cardenal Francisco Javier Errázuriz de recibir personalmente la denuncia por abusos deshonestos de parte del padre Fernando Karadima efectuada por James Hamilton.

A través de un comunicado, el Arzobispado de Santiago salió al paso de la información publicada por el diario El Mercurio que dio cuenta que el ex capellán de La Moneda, Percival Cowley, intercedió para lograr una reunión entre Hamilton y el cardenal Francisco Javier Errázuriz con el objetivo de ponerlo al tanto de la denuncia en contra de Karadima.

Percival Cowley confirmó que le pareció creíble la denuncia de Hamilton y que desarrolló la labor de interlocutor solicitada, en varias oportunidades, pero sin obtener resultados positivos con Errázuriz.

Cowley agregó que no solo ha habido poca celeridad de parte de la Iglesia en este caso en donde Hamilton denuncia hechos que datan del año 1983, cuando llegó hasta la parroquia Sagrado Corazón de El Bosque, en donde habría sufrido abusos deshonesto por parte de Fernando Karadima, su confesor y director espiritual.

El comunicado del Arzobispado señala que “en estos procedimientos, al Obispo le cabe emitir el juicio conclusivo. Por eso, se evita que sea él quien reciba las declaraciones de los acusadores y del acusado. Lo hace el Promotor de Justicia o, en su ausencia, el Canciller o el Vice-Canciller de la Curia, quienes las entregan al Promotor”.

Agrega que “esta prescindencia del trato más cercano, que lo procuran otros sacerdotes, constituye una renuncia dolorosa para un Obispo, pero necesaria en vista del procedimiento en el cual actúa de una manera similar a la de un juez”.

Al respecto, el abogado denunciante Juan Pablo Hermosilla, tratando de restarse de emitir juicios, señaló que estos asuntos dan cuenta de problemas internos al interior de la Iglesia.

Recordemos que estos antecedentes están incorporados a la causa eclesiástica que investiga el promotor de Justicia de la Iglesia Católica, Fermín Donoso, quien confirmó ayer a La Radio que la propuesta de sanciones y resultados de las indagaciones sufrió un retraso, pues la defensa solicitó una prórroga en la entrega de los descargos, basada en que los datos los ha ido recibiendo en forma parcial.