Al menos 39 personas murieron al paso de un tornado este jueves en el sur de China, donde también fueron destruidos cultivos y miles de casas.

El tornado golpeó el municipio de Chongqing (suroeste), así como las vecinas provincias de Guizhou y Hunan durante la madrugada del jueves, dejando más de 190 heridos y al menos seis desaparecidos, indicaron responsables y la prensa estatal.

El número de muertos se elevó a 39 después de confirmarse el fallecimiento de un desaparecido en Guizhou.

La televisión mostró imágenes de casas derrumbadas, árboles desraizados, deslizamientos de tierra y carreteras inundadas en Chongqing, donde murieron 29 personas y más de 70.000 se vieron desplazadas, según el ministerio de Asuntos Civiles.

Un responsable de la localidad de Xinmin dijo a la AFP que las casas más viejas sufrieron daños “muy serios”, derrumbándose algunas de ellas y que las construcciones más nuevas también resultaron destruidas.

“Todavía estamos reuniendo información sobre el desastre”, dijo el responsable.

Según el Diario del Pueblo, órgano del Partido Comunista, unas 1.000 casas situadas en seis localidades de Chongqing se habían derrumbado al menos parcialmente, mientras que otros varios miles sufrieron daños.

El coste de los daños en las seis localidades podría superar los 20 millones de yuanes (casi tres millones de dólares), añadió el diario estatal, citando cálculos preliminares.

La electricidad fue cortada en varias zonas. Algunas carreteras quedaron bloqueadas por las inundaciones, y los puentes también sufrieron daños, según el Diario del Pueblo.