A más de 2 meses del terremoto, aún quedan escombros apilados en la vía pública, los que ahora se levantan como basurales clandestinos, por la cantidad de desperdicios que acopian y que a estas alturas ya son un foco infeccioso y de malos olores.

Decenas de llamados recibió La Radio al informar sobre estos microbasurales ilegales, que afectan a populosos sectores de Los Ángeles, como la población Pedro Lagos, Villa Hermosa, Orompello, Eleuterio Ramirez, Población Sodimac, así como también al final de Baquedano, casi al llegar a la Villa Galilea.

Si bien los restos de materiales de construcción fueron botados luego del terremoto, a estos desechos se sumaron hace algunas semanas los desperdicios caseros, que hacen que innumerables esquinas de la capital de la provincia de Bío-Bío se hayan convertido en verdaderos vertederos, donde pululan moscas y perros, ensuciando aún más las calles y veredas.

Este paupérrimo escenario fue propiciado además porque los camiones recolectores no pasaron el primero de mayo, día feriado y de descanso obligatorio, lo que al parecer fue olvidado por cientos de personas que irresponsablemente dejaron sus desechos en los improvisados basureros.

Ante esto, la molestia de las personas se ha hecho sentir a diario, por la falta de criterio de algunos vecinos al no esperar que el servicio de retiro pase por sus casas, ya que los malos olores afectan en muchas ocasiones a varias residencias e incluso a más de una cuadra.

La Radio se contactó con el departamento de comunicaciones de la Municipalidad de Los Ángeles quienes informaron que constantemente se están realizando operativos para el retiro de escombros, por lo que pidieron a la comunidad más cooperación para erradicar los acopios de basura ilegales de las esquinas y sitios eriazos de la ciudad.