Los senadores Patricio Walker y Hernán Larraín, presidentes de las Comisiones de Defensa y Relaciones Exteriores, respectivamente, se mostraron dispuestos a estudiar la petición del organismo tras el terremoto, pero en el marco de las prioridades de la reconstrucción.
Imagen: senado.cl
La solicitud del director del Instituto Geográfico Militar, coronel Juan Vidal, en cuanto a reactualizar los mapas tras el terremoto del pasado 27 de febrero, fue acogida por los senadores Patricio Walker y Hernán Larraín, presidentes de las Comisiones de Defensa y Relaciones Exteriores, respectivamente.
No obstante, los legisladores señalaron que la evaluación de estas necesidades tendrá que realizarse tomando en cuenta las prioridades que existen en materia de reconstrucción a nivel nacional.
El senador Patricio Walker, precisó que “nuestras Fuerzas Armadas necesitan tener la cartografía actualizada para cumplir con las labores propias de la investigación de cuidar los fondos marinos y también las de la Dirección de Territorio Marítimo (DIRECTEMAR)”.
Indicó que “me parece que sí hubo daño en la cartografía y en la información que ellos disponen por cierto, que tiene que ser actualizada y el Gobierno y el Congreso debieran estar disponibles”.
Recordó además, que la semana pasada visitó la Base Naval de Talcahuano y los Astilleros de la Armada (ASMAR) para conocer los daños: “efectivamente, están contemplados los recursos para ir en ayuda de estas reparticiones y, respecto de otras necesidades, obviamente, vamos a ver en la Comisión de Defensa para poder apoyar este tipo de inversiones”.
PRIORIDADES
Por su parte, el senador Hernán Larraín, aseguró que “este tipo de materias requieren de definiciones que son importantes y estratégicas, pero deben analizarse en relación al resto de las tareas urgentes y las prioridades que tiene el país”.
No obstante, el parlamentario indicó que “no veo, ni tengo antecedentes de que necesitemos una nueva revisión de los mapas habrá que analizar qué fundamentos tienen”.
Añadió que “en lo más sustancial creo que hay que trabajar en el siguiente orden: primero, los temas de la emergencia; luego los de reconstrucción y después ir viendo las secuelas definitivas que va dejando este fenómeno para ir acomodando distintas áreas de trabajo como pueden ser la renovación de nuestros mapas geográficos”.
En ese sentido, mencionó que “tal vez sería bueno pensar que hay que esperar que se decante el fenómeno porque no pareciera que se haya agotado y que sus secuelas se hayan terminado”.
Sin embargo, descartó que los cambios sean significativos al punto que tengan alguna implicancia en los tratados internacionales: “no hay ninguna consecuencia entre antes y después de lo ocurrido”.
Cabe señalar que el instituto Geográfico Militar solicitó US$25 millones para rehacer los mapas actuales, en especial, las referencias del suelo submarino que, por ejemplo, subieron en promedio dos metros. Esto podría redundar en que un buque no tenga la profundidad necesaria para recalar en un puerto.
