El ministro de Cultura, Luciano Cruz-Coke, afirmó este martes que la cartera potenciará la Ley Valdés para ayudar en la reconstrucción del patrimonio histórico y cultural dañado por el terremoto y posterior tsunami del pasado 27 de febrero.

Luciano Cruz-Coke

La autoridad constató los daños generados en cuatro inmuebles patrimoniales y monumentos de Viña del Mar, cuyo valor de recuperación ascendería a mil 500 millones de pesos aproximadamente por cada museo o palacio, según estimaciones preliminares realizadas por la Municipalidad de la ciudad de jardín.

“Parte de los recursos para la reconstrucción van a salir de proyectos que se financiarán a través de fondos privados, de proyectos presentados a la Ley de Donaciones Culturales (Ley Valdés), y también de la ley que se enviará al Congreso a través de la Dirección de Reconstrucción Nacional, una entidad que tiene una participación conjunta del Consejo de Monumentos Nacionales, de la Dibam y del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes, y que se articula a través de mi persona”, explicó el ministro Cruz-Coke.

El ministro de Cultura agregó que hay dos etapas fundamentales en este proceso, el primero es tratar de pasar el invierno, porque la lluvia puede dañar a un más lo que ya está perjudicado y, una segunda etapa, que sería en la primavera, para reconstruir aquello que sea posible rescatar.

En la pagina web del Consejo Nacional de la Cultura está un documento elaborado por la Dibam y el Consejo de Monumentos Nacionales y que se denomina ‘Salvemos lo salvable’, con el objetivo de impedir que se demuelan edificios que no hayan sido supervisados por inspectores técnicos o personas especializadas en estructura, ya que se podría hacer un daño que después no se recuperaría.

“Lo que hemos visto es la memoria histórica de nuestro país, aquella que le vamos a heredar a nuestros hijos, y es parte del patrimonio que tenemos como nación”, concluyo el ministro de Cultura.

El Palacio Vergara es monumento nacional desde 2008. Tiene daños estructurales y agrietamiento de muros. En el Teatro Municipal, el sismo provocó el agrietamiento completo de los muros posteriores y el colapso de la techumbre, además de caída de ornamento sobre las butacas. El recinto, inaugurado en 1930, alberga las principales actividades culturales de la comuna y tiene una capacidad para 1.100 personas.

En el Palacio Carrasco el movimiento telúrico provocó el desplome de los recubrimientos de pilares, cielos y molduras ornamentales y recubrimientos originales. El terremoto de 1985 había dañado su frontis, con la caída de su gran terraza, la que fue reemplazada por un balcón más pequeño, en similar estilo. Finalmente, el Palacio Rioja, que es monumento nacional desde 1985, tiene daño principal en las molduras y ornamento original.