Las autoridades nicaragüenses sospechan que el crimen organizado está facilitando armas a los delincuentes comunes debido a que en los últimos dos años se duplicaron las agresiones con armas de fuego en el país, informó este lunes una fuente oficial.

“No se descarta que el crimen organizado pudiera estar armado a la delincuencia común”, afirmó el jefe de dirección de Armas, Explosivos y Municiones (DAEM) de la Policía, comisionado mayor Horacio Sobalvarro, al Nuevo Diario.

Según datos oficiales, los delitos con armas de fuego aumentaron de 3.251 en 2008 a 5.201 en 2009, período en el cual la policía se incautó de 10.730 revólveres, pistolas, escopetas, fusiles y ametralladores, entre otros armas.

Las cifras preocupan a la Policía, debido a los constantes decomisos que realizan desde que entró en vigor la Ley de Control de Armas en 2005, la cual prohíbe a los civiles adquirir armas ligeras sin autorización.

Según las estadísticas, la ley ayudó a reducir sustancialmente los delitos con armas entre 2005 y 2007, pero en 2008 comenzaron a subir de nuevo, de manera alarmante.

“Nos parece que fue mínima la cantidad de armas ilegales que quedaron en (manos de) la delincuencia” después de 2005, “pero todo indica que se armó” de nuevo, expresó Sobalvarro.

El jefe de seguridad nacional, comisionado general Francisco Díaz, aseguró sin embargo -sin mostrar cifras- que la policía registra más muertes de civiles con armas blancas que con armas de fuego.