El ministro cubano de turismo Manuel Marrero dijo que la isla esta lista a recibir hasta un millón de turistas adicional si Washington decide levantar la restricción a sus viajeros, durante una reunión en México con empresarios estadounidenses del sector.

“Tenemos garantizado lo que se necesita para operar con calidad y nuestro plan de inversiones continua elevándose para elevar el confort” con 50.000 habitaciones que dan a Cuba capacidad para enfrentar un mayor flujo de visitantes, dijo Marrero.

El ministro y una delegación de funcionarios del sector se reúnen este jueves y viernes en el balneario mexicano de Cancún con un centenar de operadores de turismo de Estados Unidos interesados en explorar posibilidades de negocios en la isla.

Cuba recibió en 2009 cerca de 2,5 millones de turistas provenientes de Canadá, Europa y Asia, y se espera que hasta un millón de estadounidenses llegue al país del Caribe en caso de que se elimine la prohibición de Washington a sus ciudadanos de viajar a ese país, indicó Marrero.

El presidente Barack Obama aligeró el año pasado las restricciones para permitir que cubanos residentes en el extranjero puedan viajar a Cuba sin ser sancionados.

Unos 296.000 cubanos volvieron de visita a su país en 2009, principalmente los que viven en territorio estadounidense.

Pero se mantiene una restricción que impide a ciudadanos de Estados Unidos viajar a Cuba sin autorización previa, a riesgo de ser multados.

Pese a esta prohibición unos 50.000 estadounidenses viajaron a Cuba en 2009 muchos de ellos a través de México, según cifras de los organizadores del evento.

“Cuba no prohíbe a los ciudadanos de ninguna parte visitar nuestro país”, enfatizó Marrero en la reunión con los empresarios.

El ministro cubano aseguró que en Estados Unidos crece la corriente de opinión favorable a un cambio de política hacia Cuba, sometida a embargo desde 1962, y que un “levantamiento de restricciones beneficiará los intereses y a los ciudadanos de Estados Unidos”.

El Congreso de ese país discute una iniciativa que eliminaría totalmente las restricciones para viajar a la isla, que es impulsada por el senador demócrata Byron Dorgan, quien participará en el encuentro a través de una video conferencia.

Pero esta iniciativa ha suscitado la inconformidad de los grupos de cubanos residentes en Estados Unidos que consideran contraproducente cualquier aligeramiento de las medidas contra el regimen comunista.

Los organizadores del encuentro en Cancún creen que este brindará una oportunidad para intercambiar información, valiosa para potenciar negocios.

“El objetivo principal es un intercambio de información porque no llega a Estados Unidos la información de la realidad”, dijo a la AFP, Kirby Jones, director de Alamar, organización que promueve el comercio y negocios con Cuba y que es una de las patrocinadoras del encuentro.

“Hay gente que en Estados Unidos dice que harán negocios con Cuba cuando todo, cambie cuando se vaya Castro, pero eso no va a pasar”, asegura Kirby porque “con Castro o sin Castro” la estructura que conforman las instituciones y las empresas cubanas seguirá funcionando.