Los fiscales implicados en la investigación de la muerte del cantante Michael Jackson pidieron a los tribunales que suspendan la licencia médica de Conrad Murray, el doctor del músico acusado de homicidio involuntario, informó el martes el diario Los Angeles Times.

Imagen: nydailynews.com

Conrad Murray, quien el 8 de febrero se declaró no culpable tras ser acusado de homicidio involuntario por la muerte de la estrella del pop el 25 de junio del año pasado.

Sin embargo, Murray volvió a practicar su profesión tras pagar una fianza de 75.000 dólares al juez de la Corte Superior del condado de Los Ángeles Keith L. Schwartz, quien le retiró el pasaporte y le prohibió que recetara sedantes a sus pacientes.

El médico debe comparecer ante la corte el 5 de abril, pero la oficina del Fiscal General de California, Jerry Brown, quiere que el mismo juez suspenda a Murray del ejercicio de su profesión hasta tanto no se realice el juicio, indicó el sitio web del diario angelino.

La AFP contactó a la Fiscalía pero ningún portavoz pudo confirmar por ahora esta petición.

Esta petición se realizó el mismo día en que una fuente no identificada aseguró al diario que uno de los guardaespaldas de Jackson dijo a la policía que investiga este caso que Murray se puso recolectar rápidamente vías intravenosas en la habitación de Jackson el día de su muerte antes de que el guardaespaldas llamara a los servicios de emergencia.

Jackson murió el 25 de junio a los 50 años en Los Angeles, tras una sobredosis de medicamentos y una intoxicación con el anestésico propofol. Su fallecimiento fue constatado veinte minutos después de recibir la inyección de propofol, mientras el doctor Murray se había ausentado unos minutos para llamar por teléfono.

El doctor Murray siempre reconoció que había administrado propofol a Jackson antes de su muerte. Pero, según él, se debió al insistente pedido del músico, que lo utilizaba como somnífero.

Murray había sido contratado como médico personal de Michael Jackson en mayo de 2009, un mes antes de su muerte, el 25 de junio. El ícono de la música pop preparaba entonces su gran regreso a los escenarios con la gira “This is it!”.