El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, expresó su certeza este lunes de que Israel seguirá contando con la “vieja amistad” de Estados Unidos.

“Estoy seguro de que (…) contamos con la vieja amistad de Estados Unidos, el país más maravilloso de la Tierra”, comentó Netanyahu a un lobby pro israelí.

Poco antes, la secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton, urgió a Israel a tomar “decisiones difíciles pero necesarias” para la paz con los árabes, al tiempo que prometió su compromiso “sólido” con la seguridad de Israel.

En un discurso dirigido al mismo lobby judío estadounidense (AIPAC), Clinton dijo que Estados Unidos no cederá en su “compromiso” de impedir que uno de los mayores enemigos de Israel, Irán, se dote de la bomba atómica. Pero las sanciones tomarán su tiempo, advirtió Clinton.

Las declaraciones de Clinton eran esperadas con expectativa, ya que tienen lugar en medio de uno de los períodos más difíciles de las relaciones entre Estados Unidos e Israel, cuando la administración del presidente Barack Obama lucha por reanimar las conversaciones de paz en Medio Oriente ante la incesante expansión de los asentamientos israelíes en los territorios palestinos ocupados.

Netanyahu no ha cedido un ápice en los planes de su gobierno de derecha de expandir la colonización en Jerusalén Este, cuya anexión en 1967 no ha sido reconocida por la comunidad internacional.

El anuncio de la construcción de 1.600 viviendas en una colonia judía del sector árabe de Jerusalén, durante una visita del vicepresidente Joe Biden a mediados de marzo cayó especialmente mal en Estados Unidos.