La llovizna que se dejó caer esta madrugada complicó la situación de los damnificados por el terremoto, en Concepción y Talcahuano. Padres temen incremento de enfermedades respiratorias en niños.
El temor de muchos ya se hizo realidad. El arribo del mal tiempo, esta vez una persistente llovizna, causó estragos en quienes soportan las inclemencias climáticas en carpas, desde el terremoto.
En un campamento particular, situado a un costado del club deportivo Huachipato en el sector Las Higueras, la mitad de las 53 familias, vive en carpas y otros fabricaron mediaguas con los restos de sus casas, de la población Santa Clara de Talcahuano, usando como material principal las planchas de zinc.
Son 170 personas, siendo 50 de ellos niños, por los cuales existe una preocupación especial con el arribo de las bajas temperaturas y el agua.
Para el padre de Agustina, una menor de 1 año y medio que jugaba bien abrigada, el temor por alguna enfermedad es evidente.
La idea de los afectados es conseguir que los propietarios del terreno, el Club Deportivo Huachipato, les conceda el sector por un año, para instalar las mediaguas ya conseguidas con Un Techo para Chile a la espera de la reconstrucción de sus hogares, la mayoría destruido por el maremoto.
