Una masiva concurrencia de fieles tuvo la celebración conocida como el “20 Chico”, en Yumbel. Las autoridades esperan que la visita de los fieles prosiga hoy.

Desde todo el país arriban fieles hasta Yumbel, la mayoría cumpliendo a pie el recorrido que media entre la carretera y la localidad, trecho de aproximadamente 10 kilómetros.

El objetivo es pagar las mandas solicitadas a San Sebastián, un santo cobrador al que más vale cumplir.

Este año la cantidad parece aumentar dijo el alcalde Camilo Cabezas.

La autoridad comunal estimó en 500.000 las personas que llegaron ayer y espera el doble culminado este fin de semana, cifra más alta que el año pasado y mucho más que las 350.000 visitas del 20 de enero, la fecha original.

Además del sacrificio físico, los fieles asisten a misas y cotizan en el numeroso comercio ambulante, aunque el municipio indicó que redujo los puestos en un 30%.

El arzobispo de Concepción calificó la gran asistencia como una profunda expresión de fe al tiempo que estimó que el terremoto provocó un sismo interno en las personas.

Agregó que el país y la región en particular necesitará mucha fortaleza para la iniciar la reconstrucción, no sólo física, sino especialmente la social, basada en los valores más profundos de la vida humana.

A la misa matinal asistió el jefe de zona de catástrofe, general Guillermo Ramírez, a quien el alcalde expuso necesidades por los 6.000 damnificadas y las 2.000 viviendas que deberán ser demolidas.