Una nueva querella se presentó ante el Séptimo Juzgado de Garantía y tiene por objeto establecer las responsabilidades personales de quienes trabajan en los organismos estatales, es decir, Onemy y Shoa, que debieran haber alertado sobre el maremoto del 27 de febrero.

Producto del desastre natural murió Fidelisa del Carmen Lastra Vásquez, quien tras el terremoto 8,8 que se registró en la Región del Bío-Bío decidió regresar a su casa a la espera de que las autoridades alertaran sobre este hecho.

El abogado Jaime Silva explicó que la acción legal se enmarca en los errores ‘groseros’ que habrían cometido estas entidades.

“Nosotros estamos interponiendo una querella por cuasidelito de homicidio en contra de quienes resulten responsables por las infracciones groseras, porque no hay otra palabra, a los mismos reglamentos de la Onemi y del Shoa que establecían que de manera natural con un sismo de más de 7,5 grados tenían que declarar la alerta de tsunami. Se ha citado a todas las personas que tienen relación con estos hechos”, dijo Mena.

En tanto, el hijo de la mujer fallecida, Waldo Márquez, afirmó que, pese a que se pueden realizar acciones civiles que busquen una reparación monetaria, nada hará que vuelva la alegría de su madre a la casa.

“Las querellas o las demandas yo entiendo que se establecen como una manera de tranquilidad, entre comillas, para establecer quiénes son los responsables y qué sanción puede haber. Ahora tú sabes que, aunque sean las lucas que sean, nunca van a pagar nada”, dijo el hijo de la fallecida.

Según se dio a conocer, Mario Vásquez, el padre de Waldo, también estuvo presente en este tsunami que arrastró su casa de Constitución pero él salvó con vida.