La alcaldesa de Molina, Mirta Segura, se manifestó consternada por el actual estado emocional que están padeciendo los menores de su comuna, tras el terremoto.

Actualmente, los niños de la comuna ya no se ven jugando en los espacios públicos, todos están con sus parientes en lo que quedó de sus viviendas y profundamente deprimidos.

Agregó, que un grupo de profesores salió a recorrer la comuna para motivar a los pequeños para que vuelvan a las escuelas que no presenten mayores daños, pero la respuesta fue negativa de la gran mayoría de los educandos.

Las mamás están choqueadas y tampoco desean que sus niños vuelvan a los colegios.

Paralelamente, se estaría presentando otro inconveniente dijo la alcaldesa, Mirta Segura. Pronto vendrán las lluvias, y necesariamente los colegios de Molina, tendrán que ser ocupados como albergues, anticipó.

Actualmente, suman más de 11 mil personas afectadas por el terremoto en la zona de Molina, así como también la agricultura y el vino.

Un panorama similar afecta al turismo, ya que las conocidas siete tazas se partieron y el escurrimiento natural de las aguas, terminó.