El Real Madrid no aprende de sus fracasos: tras la lección táctica de la Roma en 2008 y del Liverpool en 2009, esta vez fue eliminado por sexta vez seguida en octavos de final de la Liga de Campeones por el juego del Lyon ayer miércoles, por culpa de los jugadores y no del sistema.

Imagen: mediotiempo.com

La prensa española encontró a los culpables el jueves por la mañana: el entrenador chileno Manuel Pellegrini, incapaz de responder a los cambios tácticos de Claude Puel, el brasileño Kaká, desaparecido en el segundo tiempo, y el argentino Gonzalo Higuaín, que erró un gol cantado en el primer tiempo.

El diario Marca pidió en su portada del jueves la dimisión de Pellegrini, décimo entrenador del equipo en diez años.

Es muy probable que el ex entrenador del Villarreal no cumpla con su contrato hasta 2011 a pesar que el director general del equipo blanco, Jorge Valdano, lo confirmó en sus funciones el miércoles por la noche, tras el desastre.

Que el Real Madrid gane o no la Liga en mayo no cambiaría las cosas. Esta nueva derrota europea, la sexta en octavos de final, ha hecho mucho daño como para no tener consecuencias.

El Real Madrid parece encaminarse hacia otra pretemporada inmutable: gira por Asia y/o Estados Unidos para compensar el haber sido rápidamente eliminado de la Liga de campeones, llegada de jugadores muy caros, partida de “ex” grandes jugadores y cambio de entrenador.

Porque el gran problema del club con más títulos en Europa (nueve Ligas de Campeones) desde que no fuera renovado el contrato del ahora seleccionador nacional, Vicente Del Bosque, en 2003 por el presidente Florentino Pérez, es que no dejan tiempo a un equipo técnico para poner en marcha un auténtico proyecto de juego.

Desde Del Bosque, ningún entrenador del Real Madrid pudo contar con un año para formar un equipo, ni participar por ejemplo en la elección de los jugadores, terrenos reservados al presidente y a su director deportivo.

Su eterno rival en España, el Barcelona, dio un buen ejemplo en los últimos años. Eliminado de la Liga de campeones en la temporada 2003-2004 tras una Liga desastrosa (6º puesto), el Barça devolvió las cosas a su lugar, con un nuevo presidente, Joan Laporta, nuevo secretario técnico, Txiki Begiristain, y nuevo entrenador, Frank Rijkaard.

El club dejó el tiempo necesario a Rijkaard para trabajar, a pesar de una primera temporada que arrancó mal y terminó sin títulos. Y los resultados finalmente llegaron: Liga en 2005, 2006, y sobre todo Liga de campeones en 2006.

Rijkaard se fue en 2008 y llegó Guardiola que continuó con el sistema impuesto, un 4-3-3 sólido pero ofensivo y aportando disciplina, con lo cual no tardaron en llegar los resultados: seis títulos, con una nueva Liga de campeones, en 2009.

El Barça tiene un ‘copyright’ en materia de juego, como el equipo de España dirigido por Del Bosque. El Real Madrid está aun lejos de eso y sigue haciendo jugar a sus estrellas (Kaká, Cristiano Ronaldo, Higuaín…) unos junto a otros y no unos con otros.

Desde 2003, el Barça (2 Ligas de Campeones, 3 Ligas y una Copa del Rey) tuvo tres entrenadores, el Real Madrid (2 Ligas), nueve.

“El Lyon ha sido más equipo, hay que decir la verdad”, reconoció, lúcido, Guti, uno de los capitanes del equipo tras el partido del miércoles.

“Hay que dar la cara y aprender de los momentos malos”, dijo por su parte el portero Iker Casillas.