Unos 8.000 libros, más de 4.000 discos y hasta la lápida de su perra son parte de los 14.000 objetos del tres veces presidente argentino Juan Perón y de Evita, su carismática segunda esposa, atesorados en una oficina de Buenos Aires que empezaron a ser subastados.

Juan y Evita Perón

Juan y Evita Perón

Los objetos resguardados en la pequeña oficina del centro de la capital argentina revelan gran parte la vida personal, sus gustos y los obsequios que recibió Perón durante su exilio en España, entre finales de los 50 y principios de los 70, y los que conservó de la popular Evita, fallecida en 1952.

Perón, presidente en los períodos 1946-52, 1952-55 y 1973 hasta su muerte en 1974, “recibía a decenas de políticos y gremialistas argentinos y de todo el mundo, en su residencia madrileña de Puerta de Hierro que le llevaban regalos o documentos”, dijo Mario Rotundo, responsable de la subasta y colaborador de Perón en España.

“A algunos de sus visitantes los estimaba, pero a los que no les tenía mucha simpatía los llevaba primero hasta el jardín de la residencia donde estaba sepultada su perra ‘Canela’ y les leía la leyenda de la lápida: ‘el mejor y más fiel de los amigos’”, dijo Rotundo al mostrar ese objeto que saldrá a subasta con un precio base de 38.700 dólares (Más de 20 millones de pesos chilenos)

La amplia biblioteca del extinto mandatario argentino incluye una gran diversidad de géneros literarios pero una predilección por figuras políticas históricas, por ejemplo de Winston Churchill, Nikita Kruschev o Benito Juárez, presidente de México de origen zapoteca en el siglo XIX.

Al igual que los libros, “una buena parte de los 4.000 discos fueron obsequiados a Perón en muchos casos por sus intérpretes o compositores” y son ofrecidos al público a una base 4.754 dólares (2 millones y medio de pesos chilenos).

Una de las estrellas de la subasta es un alhajero porcelana de Limoges que la famosa cantante y bailarina franco-estadounidense Josephine Baker (1906-1975) obsequió a la carismática Evita, a un precio inicial de 7.622 dólares (Más de 4 millones de pesos chilenos).

“Evita y Baker tenían mucha afinidad porque ambas nacieron en la pobreza. En una ocasión, Josephine visitó un manicomio en Buenos Aires y le llevó a Perón, cuando era presidente, la pésima comida que les daban a los internos para que sin vueltas intentara modificar esa situación”, relató Rotundo, quien dijo ser el heredero de los bienes muebles de Perón.

También destaca un libro original del siglo XVII que le obsequiaron a Evita en Málaga, España, durante una gira que realizó por Europa en 1947, uno de los objetos más caros, con una tasación inicial de 9.043 dólares (4 millones 800 mil pesos).

El legado también está integrado por una colección de mates y bombillas, los implementos para ingerir la popular infusión rioplatense, que era “una costumbre diaria de Perón”, indicó el rematador, quien acompañó al extinto mandatario argentino en su exilio en los años 70.

En 2004, la empresa Aerolíneas Argentinas, entonces de capitales españoles, compró el sudario que envolvió el cuerpo embalsamado de Evita, por el que pagó 160.100 euros (más de 115 millones de pesos chilenos), 4 veces más que su precio de base, durante una subasta en Roma de la firma Crhistie’s.