A dieciséis semanas para el inicio del Mundial de Sudáfrica, planificada para el 11 junio, el secretario general de la Federación Internacional de Fútbol (FIFA), Jérôme Valcke, repasó los aspectos que quedan por resolver, pero reiteró la confianza del organismo en el éxito del evento.

Estadio Ellis Park / zocan.com

Estadio Ellis Park / zocan.com

Entre esas cuestiones estaría sobre todo el final de las obras del estadio de la final, el Soccer City de Johannesburgo, y la necesidad de fomentar los ‘packs VIP’, tras el poco éxito registrado hasta el momento con esta propuesta para los hinchas más pudientes.

“Valcke es el hombre encargado del Mundial. Si todo va bien, es gracias a él, y si algo va mal, será mi culpa”, precisó el presidente del organismo, Joseph Blatter. “Será un gran Mundial. Por favor, tened confianza en nosotros, confiad en Sudáfrica”, insistió el dirigente suizo.

El ‘corazón’ del torneo, el Soccer City de las afueras de Johannesburgo, en el mítico e histórico Soweto, está aún por terminar.

“Es nuestro principal estadio y eso es un problema”, reconoció Valcke. “Pero estamos solucionándolo. La fecha límite está fijada en el 15 de marzo. Nos hace falta tiempo luego para efectuar pruebas: acceso a los estadios, venta de entradas, etcétera”, explicó.

El Soccer City tiene además una gran carga simbólica al estar construido en el ‘township’ de Nelson Mandela y debe acoger también el choque inaugural del primer Mundial en suelo africano, que enfrentará a los anfitriones sudafricanos con México.

“Todos los otros estadios están listos. El de Durban, en particular, es uno de los estadios más bonitos que se hayan visto nunca en un Copa del Mundial”, aseveró el secretario general.

En el tema de la venta de entradas, 2,1 de los 2,9 millones de boletos del Mundial ya tienen dueño, pero la FIFA se ha visto obligada a revisar a la baja el número de visitantes previstos para junio en Sudáfrica. “Esperábamos entre 400.000 y 500.000, pero serán menos. ¿Cuántos? Ni idea”, dijo Valcke.

Los tres partidos de Inglaterra en la fase de grupos ya tienen todas las entradas vendidas, pero los otros países no han tenido hasta el momento el mismo tirón. Desde la FIFA han optado por incitar a los touroperadores a bajar sus precios para favorecer la demanda.

En lo que se respecta a sus ‘packs de lujo’ (lugares preferentes en los estadios y otro tipo de prestaciones añadidas), la crisis mundial es la culpable de que el proyecto no esté siendo un éxito, explicó el directivo francés.

“Mi trabajo es que los estadios estén llenos. No debería decir esto, pero si el mercado negro (reventa) funciona, eso quiere decir que el evento marcha”, señaló.

Desde la atribución del torneo a Sudáfrica, la seguridad ha sido uno de los principales motivos de preocupación de los organizadores, debido a los altos índices de criminalidad y homicidios del país.

“En las sedes del Mundial no pasará nada”, tranquilizó Valcke. “En París por ejemplo, uno no debe ir solo por algunos barrios alrededor del Stade de France (Saint Denís, norte de París)”, explicó sobre la imposibilidad de garantizar la seguridad al 100% en cualquier país.

Del 4 al 6 de marzo, los jefes de policía y los responsables de seguridad de los 32 equipos participantes se reunirán en Zúrich, en la sede de la FIFA, para preparar de forma conjunta el Mundial.

“El Mundial de Brasil-2014 nos pondrá ante similares dificultades. Nuestro sistema de venta de entradas es demasiado rígido, eso es un error y tenemos que aprender de él, para ser más flexibles”, avanzó sobre los planes para próximas competiciones.