El año pasado se registraron 55 casos de mujeres asesinadas y sólo ocho de ellos poseían medidas de protección.

Esta nueva ley permitirá que los agresores deban reportarse en una unidad policial recurrentemente por un plazo de dos años, medida que según el Sernam implica mayor seguridad y control.

También sancionará de manera más dura los homicidios cuando son cometidos por los cónyuges o ex parejas, agravará los delitos sexuales por parte de dos o más personas y sancionará los daños materiales, es decir, perjuicios a los bienes de las mujeres.

La ministra del Sernam, Carmen Andrade, afirmó que lo más importante es que las situaciones de amenaza y violencia se denuncien.

Andrade agregó que esta nueva ley aportará al cambio cultural, puesto que catalogará a los asesinos de mujeres como femicidas.