Más de 500 grifos abiertos se registran cada día en la capital, en su mayoría en las comunas periféricas donde los residentes encuentran en estos elementos para combatir incendios un método eficaz para paliar el calor.

Grifos

Imagen: Jeckillson en Flickr

Según el director de comunicaciones de Aguas Andinas, Cristián Esquivel, esta apertura no autorizada de grifos puede provocar problemas entre los que que destacan: La inutilización de estos y la baja en la presión de agua para los vecinos del sector.

Las consecuencias que puede traer esta forma de refrescarse no son mínimas, así lo advirtió el Jefe de Prevención de Riesgos de Bomberos de Chile, Jorge Albornoz, quién explicó que al abrir forzosamente un grifo se corre el riesgo de dañarlo y dejarlo inhabilitado para el uso de Bomberos ante un posible incendio.

Finalmente, Albornoz agregó que abrir un grifo para tomar agua o para cualquier actividad que no sea parte de Bomberos de Chile es considerado delito.