Imagen: taringa.net
Las inyecciones de insulina pronto serán una cosa del pasado para los diabéticos gracias a la nanotecnología.
La profesora de bioingienería, Tejal Desai, de la Universidad de California en Estados Unidos, es la encargado de implantar millones de células pancreáticas que secretan insulina dentro de pequeñas cápsulas. Éstas, pueden instalarse en el cuerpo humano en un esfuerzo por crear un páncreas artificial.
La cápsula funciona así: cuando la glicemia fluye en su interior estimula las células para que produzcan insulina y así controlen los niveles de azúcar.
El dispositivo tiene poros nano, tan pequeños que los anticuerpos del hombre no pueden atacar dichas células. Pero, al mismo tiempo, son lo suficientemente largos para que la insulina pueda fluir adentro y fuera del cuerpo.
