Cerca de un mes en el cinerario de Osorno -y con posibilidades de permanecer allí hasta enero- lleva el cuerpo del empresario Eduardo Glatz, luego que una disputa por su herencia haya impedido su cremación.

El insólito caso ocurre luego de la apelación que presentó en la Corte Suprema el abogado de Pamela Alarcón, ante la negativa de la Corte local de acoger su recurso de protección para ser reconocida como hija legítima.

Ahora, será la Tercera Sala Constitucional del Tribunal de Alzada quien decidirá si los restos del empresario son cremados o permanecen en conservación en el Cinerario Cristo Protector de Osorno.

Si se revoca el fallo, el cuerpo del hombre podría estar en conservación hasta enero, ya que en el juicio por reclamación de paternidad se fijó audiencia preparatoria para el día 10 del mismo mes en el Juzgado de Familia de Puerto Montt.

Según información recabada por La Radio, el comerciante Eduardo Glatz dejó una cuantiosa herencia, como propiedades, vehículos y también activos bancarios por cerca de 180 millones de pesos.