39 personas murieron el viernes en la noche en Rusia al descarrilar un tren de pasajeros entre Moscú y San Petersburgo, informaron el sábado las agencias ITAR-TASS e Interfax, citando fuentes oficiales, luego de un precedente balance que daba cuenta de 25 muertos.

“Son 39 en total” dijo Alexander Basulin, portavoz del ministerio ruso de Situaciones de Emergencia, citado por ITAR-TASS. “En un comienzo había 25, pero fueron encontrados otros 14 fuera de los wagones.

De su lado, Interfax citó un socorrista que pidió mantener el anonimato, el que señaló que el balance de víctimas fatales había aumentado a 39, luego de un informe previo dando cuenta de 25 muertos.

Según la ministra rusa de Sanidad y Desarrollo Social, Tatiana Golikova, citada por la agencia Interfax, otras 95 personas están heridas y ya fueron hospitalizadas.

“Un eventual atentado es una de las versiones” de la policía sobre el accidente, indicó por su parte un responsable de los ferrocarriles rusos (RJD), citado por la agencia Itar-Tass.

“Esta versión debe ser cuidadosamente estudiada por las fuerzas del orden”, añadió asimismo Alexandre Pirkov, consejero del presidente de los ferrocarriles rusos, citado por Interfax.

Según una fuente de las fuerzas del orden rusas citada por Interfax, “cerca de la vía ferroviaria se descubrió un agujero de obús de un metro de diámetro y hay testigos que afirman haber oído una fuerte explosión antes del accidente”.

“Todo esto puede ser una prueba de un eventual atentado”, precisó dicha fuente.

Otra fuente de la seguridad citado por la agencia Ria-Novosti añadió que el agujero pudo haber sido causado por “la explosión de un artefacto colocado bajo uno de los vagones”.

Interfax subrayó que, sin embargo, por el momento no hay confirmación oficial alguna de la posible hipótesis de atentado.

El descarrilamiento de cuatro vagones del “Nevski Express” que cubre el trayecto entre Moscú y San Petersburgo ocurrió a las 21:34 locales (18H34 GMT)” en la región de Novgorod (noroeste de Rusia), según un portavoz de los ferrocarriles rusos (RJD).

El tren estaba formado por 14 vagones que transportaban unos 660 pasajeros, señaló el ministerio ruso de Situaciones de Emergencia citado por Itar-Tass.

Las operaciones de rescate estaban en curso y la mayoría de los pasajeros que sufrieron heridas habían sido evacuados, según las agencias rusas.

Varios equipos médicos y dos aviones del ministerio ruso de Situaciones de Emergencia con equipos de hospital ambulantes fueron enviado a la región, a donde también se mandó un tren de reserva, según la misma fuente.

Hacia las 01H00 GMT del sábado todos los pasajeros habían sido ya evacuados y los heridos hospitalizados mientras en el lugar del accidente proseguían las tareas de rescate.

“Dos vagones se dieron completamente la vuelta. Mucha gente había quedado aplastada bajo el metal. Escuchaba gritos y lamentos”, contó al canal televisivo Vesti Andrei Abramenko, un policía que aparentemente viajaba en el tren en el momento del suceso.

El presidente ruso, Dimitri Medvedev, fue informado del accidente, anunció el servicio de prensa del Kremlin.

“El jefe del Estado encargó al responsable del Servicio Federal de Seguridad (FSB), Alexandre Bortnikov, y al fiscal general ruso, Yuri Chaika, poner en marcha una investigación sobre las causas” del descarrilamiento, indicó en un comunicado.

La Casa Blanca, por su parte, se declaró el viernes “profundamente entristecida” por “la terrible pérdida de vidas y heridos registrados en el descarrilamiento”, según un comunicado de su portavoz, Robert Gibbs.

Asimismo, Shoigu, convocó en Moscú una reunión de urgencia con sus homólogos de Interior, Rachid Nurgaliev, y Sanidad y Desarrollo Social, Tatiana Golikova y tenía previsto trasladarse al lugar del incidente el sábado por la mañana, según Interfax.

En agosto de 2007, un atentado con bomba provocó el descarrilamiento de un tren del mismo tipo causando 60 heridos y despertando el espectro de los ataques de la rebelión chechena o de los grupúsculos nacionalistas.