El jefe de Estado Mayor conjunto del ejército alemán dimitió a raíz de informaciones sobre ocultamiento de pruebas en la investigación de un controvertido bombardeo el 4 de septiembre en Afganistán, anunció el ministro de Defensa, Karl-Theodor zu Guttenberg.

Guttenberg indicó al Parlamento que había decidido aceptar el pedido del jefe de Estado Mayor”, Wolfgang Schneiderhan, de dejar el cargo, y que también quedaba separado de sus funciones el secretario de Defensa Peter Wichert.

El ministro precisó que había adoptado su decisión tras las revelaciones del semanario Bild sobre ocultamiento a la opinión pública y a la justicia alemanas de informaciones procedentes del ministerio de Defensa que investiga un bombardeo que, según la OTAN, pudo haber matado a 142 personas.

El 4 de septiembre, las fuerzas de la OTAN bombardearon, por orden del coronel alemán Georg Klein, 2 camiones cisterna robados por islamistas talibanes cerca de Kunduz (norte de Afganistán).

Un informe de la OTAN indica que en el ataque murieron no solamente islamistas, sino también de 30 a 40 civiles.

El oficial germano explicó que su decisión se debió al temor de que los insurgentes usen los camiones como bombas rodantes.