El joven violinista ruso Sascha Rozhdestvensky se presentó el reciente fin de semana junto a la Orquesta Sinfónica de Chile, como solista del Concierto Nº 4, de su compatriota Alfred Schnittke y obtuvo un éxito clamoroso que le obligó a salir varias veces a agradecer al escenario y ejecutar 2 encores, una pieza de Bach y una polka del propio Schnittke.

El joven músico, que habitualmente actúa como solista con las más grandes orquestas del mundo, aseguró que se sintió feliz de poder difundir la música del compositor ruso en Chile, país con el que tiene una gran cercanía. En el concierto de viernes y sábado, mostró un talento innato junto a un gran dominio del violín y una acabada preparación y conocimiento de la obra de su compatriota.

El actuará junto a la Sinfónica de Chile, dirigida por su titular Michal Nesterowicz, en esta segunda visita a Chile, ya que la primera fue hace 10 años cuando estuvo recorriendo Tierra del Fuego, la Región de Atacama y Valparaíso.

El programa contempló además la ejecución de la Quinta Sinfonía de Serguei Prokófiev, que la Sinfónica interpretó con su acostumbrada jerarquía.