La agrupación de profesionales afectados por la entrega de becas de Magíster y Doctorado del Conicyt criticó este sábado la decisión de la ministra de Educación, Mónica Jiménez, de pedir la renuncia de la directora de la entidad, Vivian Heyl, tras los problemas acaecidos con las Becas Chile.

Fuente: Agencia UPI.

Mediante un comunicado, los afectados aseguraron que “la reacción del Gobierno de remover de su cargo a es una reacción de ‘quema de fusible’, luego de las impresentables declaraciones de la ministra de Educación en relación a que gente que no merecía la beca la había obtenido, y gente que sí la merecía se había quedado afuera”.

Al respecto afirmaron que el problema “no se soluciona cortando el hilo por lo más delgado, ni quemando un fusible para evitar la salida de la Ministra de Educación de su cargo, dado que la solución a esta situación no pasa por el abandono del cargo de ninguna autoridad relacionada a este proceso”.

A su juicio la solución pasa porque se respeten los acuerdos relacionados al proceso, como la ponderación de los puntajes “tal como establecían las bases del concurso y que fueron aprobadas por la Contraloría General de la República, y el mantenimiento de 21 puntos como puntaje de corte, de acuerdo a la decisión del comité asesor de Conicyt, que para ello consideró criterios académicos y económicos, por lo que su modificación es una arbitrariedad”.

Los afectados se mostraron confiados en “el criterio y moralidad de nuestras autoridades, y que ante la ocurrencia de 2 errores tan graves como los que ha presentado este proceso (cambio de las bases del concurso de manera unilateral y alza del puntaje de corte establecido por el comité asesor), sean capaz de adoptar la solución ecuánime para este caso, que es otorgar becas a todos aquellos que hayan obtenido más de 21 puntos en sus postulaciones”.