Preocupación generó entre parlamentarios nacionales, la posibilidad de que el Presidente de Perú, Alan García, insista en su propuesta de un pacto de no agresión para Sudamérica, durante la cita que sostendrá con el Papa Benedicto XVI.

El informe es de Esteban Acuña de Radio Bío-Bío Santiago

Una revisión a la agenda de la Presidenta Michelle Bachelet encendió las alarmas. Sólo 48 después de que la Jefa de Estado concrete su cita con el Papa Benedicto XVI, el Mandatario peruano, Alan García, tendrá su propia reunión con el Pontífice, y muchos temen que, una vez más, plantee la necesidad de firmar un pacto de no agresión en la región.

El Gobierno ha dicho en todos los tonos que no le gusta el tenor de la propuesta de Lima, sobre todo por su lenguaje bélico. Por esto, el diputado de la UDI y miembro de la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara, Iván Moreira, planteó la necesidad de que La Moneda establezca un plan de contingencia, para contrarrestar la estrategia de García.

Según Moreira, Perú busca mostrar a Chile como un país agresivo y sumido en una carrera armamentista, en circunstancias que las compras de nuestras Fuerzas Armadas sólo obedecen a planes de recambio y renovación.

El diputado dice que la idea es redoblar los esfuerzos para defender la postura de Chile en el foro internacional, no aceptar descalificaciones y demostrar que García sí está haciendo uso político en su estrategia presidencial.

En esa misma línea, el diputado del PPD y miembro de la Comisión de Relaciones Exteriores, Jorge Tarud, se sumó a las críticas a una posible mención a Chile en la reunión de Alan García y el Papa Benedicto XVI.

Moreira y Tarud descartaron que la ofensiva comunicacional peruana pueda incidir en los resultados del fallo por el límite marítimo que se sigue en la Corte Internacional de la Haya. Sin embargo, recomiendan a las autoridades no confiarse.