El Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA) exigió este lunes al gobierno de facto hondureño que respete la vida del presidente destituido Manuel Zelaya, que regresó clandestinamente al país, y que se evite la violencia.

El secretario general de la Organización, José Miguel Insulza, se declaró dispuesto a viajar este mismo martes a Tegucigalpa para contribuir a solucionar la crisis, tras 86 días de golpe de Estado.

“El Consejo exige a las autoridades de facto plenas garantías para asegurar la vida y la integridad física del presidente Zelaya y un trato consecuente con su alta investidura así como el retorno a la presidencia de la República”, pidieron los 33 embajadores ante la OEA, reunidos en sesión extraordinaria.

“El Consejo Permanente demanda a todos los sectores de la sociedad hondureña actuar con responsabilidad y prudencia, evitando actos que puedan generar violencia”, explicó el texto.

Poco después de conocerse el regreso de Zelaya, el gobierno de facto presidido por Roberto Micheletti decretó el toque de queda.

Miles de personas se agolparon ante la embajada de Brasil en la capital, donde Zelaya pidió y obtuvo refugio.

(AFP).